Lamentarán el error del año pasado. Tenían la sesión aquella misma tarde, la que aceptaron a cambio de disminuir condena. A través de aquel cristal pude asistir al momento en el que el psiquiatra tuvo que detener la hipnosis, el corazón empezaba a fallarles entre terribles convulsiones y gritos de dolor. Ahora ya saben lo que es perder a un hijo.
Autora: Isabel González
Escalofriante y contundente. Enhorabuena.
ResponderEliminarLo encontré Fernando, gracias por la publicación. Este micro es uno de los que más me gustan, pienso que reúne las características de este género. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias Marcos, me alegro de que te haya gustado.